En Argentina, el interruptor termomagnético de 380 es un componente fundamental para la protección de sistemas eléctricos de alta tensión. Diseñado para operar a 380 voltios, este dispositivo ofrece una defensa efectiva contra sobrecargas y cortocircuitos, cumpliendo con las normativas de seguridad vigentes. Con diversas capacidades de corriente y una sólida construcción, se convierte en una opción confiable para entornos industriales y comerciales exigentes. A continuación, exploraremos en detalle sus características y especificaciones técnicas para comprender su importancia en la protección de instalaciones eléctricas.

Interruptor Termomagnético de 380: Características y Especificaciones

Características generales:

El interruptor termomagnético de 380 está diseñado específicamente para sistemas eléctricos de 380 voltios, ofreciendo una protección efectiva contra sobrecargas y cortocircuitos. Con una alta capacidad de ruptura, cumple con todas las normativas de seguridad eléctrica vigentes, garantizando la seguridad de las instalaciones. Además, se encuentra disponible en diferentes capacidades de corriente para adaptarse a las necesidades específicas de cada aplicación.

Especificaciones técnicas:

- Tensión nominal: 380V. - Corriente nominal: desde 10A hasta 100A. - Capacidad de ruptura: desde 5kA hasta 25kA. - Número de polos: monofásico, bifásico o trifásico. - Tipo de disparo: térmico y magnético. - Montaje: en riel DIN. - Indicador de estado: permite visualizar la presencia de disparo y la posición del interruptor en todo momento. - Material de fabricación: cuenta con una carcasa de material termoplástico resistente a impactos, asegurando durabilidad y protección.

Estas características y especificaciones convierten al interruptor termomagnético de 380 en una opción confiable y segura para la protección de instalaciones eléctricas de alta tensión en diversos entornos industriales y comerciales.

Interruptores termomagnéticos de 380

En el mercado de Argentina, los interruptores termomagnéticos de 380 son dispositivos utilizados para la protección de circuitos eléctricos de alta potencia. Estos interruptores son diseñados para soportar corrientes de 380 voltios, lo que los hace ideales para aplicaciones industriales y comerciales que requieren un mayor nivel de protección. Los interruptores termomagnéticos de 380 suelen ser robustos y confiables, capaces de soportar cargas pesadas y condiciones adversas.

Estos interruptores pueden variar en características y funcionalidades dependiendo del fabricante y del modelo específico. Algunas de las características comunes que se pueden encontrar en los interruptores termomagnéticos de 380 incluyen capacidad de corte de corriente, sensibilidad ajustable, protección contra sobrecargas y cortocircuitos, y capacidad de conexión a sistemas de monitoreo remoto. Es importante seleccionar el interruptor adecuado para cada aplicación, considerando la potencia eléctrica requerida, el tipo de carga a proteger y las condiciones ambientales en las que operará el dispositivo.