La encapsuladora es una herramienta fundamental en oficinas, imprentas y centros de copiado, ya que permite proteger y dar un acabado profesional a una amplia variedad de documentos. Con capacidad para encapsular desde tamaño carta hasta tabloide, y una velocidad de entre 500 y 1000 documentos por hora, es una máquina eficiente para procesar grandes cantidades en poco tiempo. Trabaja con películas de poliéster o polipropileno, con un grosor de 1.5 a 10 mil, garantizando la protección adecuada. Su sistema de calentamiento por rodillos o calor asegura una adherencia correcta de la película al documento. Compacta, con dimensiones promedio de 80 cm de ancho, 50 cm de alto y 40 cm de profundidad, y un peso que varía de 20 a 40 kg, es estable y fácil de ubicar. Con un consumo de energía de 500-1000 W y voltaje estándar de 220 V, es eficiente y compatible con la mayoría de los entornos de trabajo. Además, algunas encapsuladoras pueden contar con funciones adicionales como corte automático y ajuste de temperatura, añadiendo versatilidad al proceso de encapsulado. En el mercado argentino, se encuentran diferentes tipos de encapsuladoras, cada una adaptada a las necesidades de producción de diversas industrias, desde automáticas para alto volumen, hasta manuales para pequeñas producciones. También existen encapsuladoras específicas para la industria farmacéutica y de suplementos alimenticios, ofreciendo precisión y seguridad en el encapsulado de diferentes productos. La elección del tipo de encapsuladora dependerá de las necesidades específicas de cada empresa y del tipo de producto a encapsular.

Características y Especificaciones de la Encapsuladora

Capacidad de Encapsulación

La encapsuladora tiene la capacidad de encapsular documentos que van desde tamaño carta hasta tamaño tabloide, lo que la hace versátil para diferentes tipos de documentos y necesidades de protección.

Velocidad de Encapsulación

Con una velocidad que oscila entre 500 y 1000 documentos por hora, la encapsuladora es una herramienta eficiente para procesar una cantidad considerable de documentos en poco tiempo.

Grosor de la Película de Encapsulado

La máquina puede trabajar con películas de encapsulado que tienen un grosor que va desde 1.5 hasta 10 mil, lo que permite adaptarse a diferentes requerimientos de protección y durabilidad.

Tipo de Película

Por lo general, la encapsuladora utiliza películas de poliéster o polipropileno, materiales resistentes que garantizan la protección adecuada de los documentos encapsulados.

Sistema de Calentamiento

El sistema de calentamiento puede ser por rodillos o por calor, asegurando un proceso eficaz de encapsulado que garantiza la adherencia correcta de la película al documento.

Tamaño de la Máquina

El tamaño de la máquina varía según el modelo, pero en promedio suele ser de 80 cm de ancho, 50 cm de alto y 40 cm de profundidad, lo que la hace compacta y fácil de ubicar en diferentes espacios de trabajo.

Peso

Con un peso que va desde los 20 hasta los 40 kg, dependiendo del modelo, la encapsuladora es lo suficientemente robusta para garantizar estabilidad durante su funcionamiento.

Consumo de Energía

La encapsuladora tiene un consumo de energía aproximado de 500-1000 W, lo que la hace eficiente en términos de consumo energético.

Voltaje

Funciona con un voltaje estándar de 220 V, lo que facilita su conexión a la red eléctrica común en la mayoría de los entornos de trabajo.

Aplicaciones

Ideal para oficinas, imprentas y centros de copiado, la encapsuladora es una herramienta fundamental para proteger y dar un acabado profesional a una amplia variedad de documentos.

Funciones Adicionales

Algunas encapsuladoras pueden contar con funciones de corte automático y ajuste de temperatura, lo que añade versatilidad y comodidad al proceso de encapsulado.

Tipos de encapsuladoras

En el mercado argentino, se pueden encontrar diferentes tipos de encapsuladoras, cada una con características específicas para adaptarse a las necesidades de producción de diferentes industrias. Entre los tipos más comunes se encuentran las encapsuladoras automáticas, semiautomáticas y manuales. Las encapsuladoras automáticas son ideales para líneas de producción de alto volumen, ya que pueden llenar, sellar y etiquetar de forma rápida y eficiente. Por otro lado, las encapsuladoras semiautomáticas son una opción intermedia, que requiere cierta intervención humana para el proceso de encapsulado, pero que sigue siendo más rápida que las manuales. Por último, las encapsuladoras manuales son ideales para pequeñas producciones o para aquellos que buscan una opción más económica y fácil de usar.

Otro tipo de encapsuladoras que se pueden encontrar en el mercado argentino son las encapsuladoras de cápsulas duras y blandas. Las encapsuladoras de cápsulas duras son ideales para la industria farmacéutica, ya que permiten encapsular medicamentos de forma precisa y segura. Por otro lado, las encapsuladoras de cápsulas blandas son utilizadas en la industria de suplementos alimenticios y cosméticos, ya que permiten encapsular líquidos y aceites de forma sencilla. En resumen, la elección del tipo de encapsuladora dependerá de las necesidades específicas de producción de cada empresa y del tipo de producto que se desea encapsular.