Explorando el universo Tatin Alfajores

Adentrémonos en un universo donde el dulce de leche es rey y la exquisitez su corona. Hablamos del mundo mágico de los alfajores, ese manjar argentino que se ha vuelto una joya gastronómica mundialmente reconocida por sus variantes infinitas. Las marcas Havanna, Cachafaz, Jorgito, Arcor y Terrabusi son algunos titanes emblema de esta tradición culinaria argentina; cada uno con su toque distintivo para deleitar al más exigente paladar goloso. Desde las clásicas recetas bañadas en chocolate negro o blanco hasta combinaciones audaces como fruta membrillo o brownie minitorta sin olvidar opciones veganas e incluso versiones aptas para celíacos. El sabor inigualable del Alfajor Tatin nos invita a perderle el temor a lo desconocido y adentrarnos en este festín caramelizado.


Havanna
Havanna, el emblema de Mar del Plata y sinónimo indiscutible de alfajores en Argentina. Su oferta es un viaje al dulce deleite: desde su clásica caja con 8 unidades que pesan apenas 90 gramos cada una, hasta sus irresistibles Havannets; seis pequeñas joyas envueltas individualmente para garantizar la frescura a cada mordida. Pero eso no es todo, también puedes optar por los packs mixtos de doce o seis unidades si te encanta variar entre sabores tradicionales y chocolate puro. Y hablando de chocolate... ¿Qué tal una docena solo dedicada a esta divinidad? Los Alfajores Havanna Chocolate son simplemente imperdibles para cualquier fanático del cacao. Ahora bien, si eres un verdadero conocedor y buscas algo más intenso aún: los Alfajores 70% Cacao Puro serán tu perdición; nueve piezas donde se fusionan lo amargo propio del alto contenido en cacao y ese dulzor característico que tanto amamos en estos manjares argentinos.

Cachafaz
Bienvenidos al universo del sabor, donde Cachafaz, la marca de alfajores por excelencia en Argentina te invita a explorar su maravillosa variedad. Alfajor relleno con mousse de chocolate o dulce de leche cubierto en un baño seductormente crujiente y oscuro que promete derretirse lentamente para revelar el exquisito centro. Los amantes del chocolate blanco pueden deleitarse con las unidades bañadas en este delicado manjar; una experiencia sensorial única que no podrás dejar escapar. Y si buscas algo tradicional pero igualmente sorprendente, los alfajores maicena son tu opción perfecta: seis unidades llenas de autenticidad argentina listas para ser descubiertas.

Para quienes prefieren experimentarlo todo sin quedarse solo con uno, existe la caja mixta compuesta por doce piezas divinamente distintivas; mitad sumergidas en el poderoso abrazo del chocolate negro y mitad envueltas magistralmente bajo capas blancuzcas irresistibles.

Pero eso no es todo... ¿Qué tal unos Conitos? Pequeños pilares hechos arte comestible disponibles tanto en pack individual como múltiple porque sabemos que probar sólo uno nunca será suficiente.

Y así es cómo Cachafaz se convierte más allá de un simple nombre: Es adentrarte a mundos increíbles desde cada bocado inigualable ofreciendo productos superlativos dentro del segmento Almacén > Dulces y Chocolates > Golosinas asegurando siempre calidad premium e indescriptible placer culinario argentino.

Jorgito
Jorgito, una marca emblemática del paladar argentino que se ha arraigado en el corazón dulce de la nación. Esta leyenda chocolatera ofrece opciones brillantes para los amantes de las golosinas y redefine la imagen clásica del alfajor con sus innovadoras combinaciones. Su Alfajor Jorgito Blanco te envuelve en un romance cremoso e irresistible con su textura única y relleno generoso de dulce de leche; cada caja contiene 24 unidades perfectas para compartir o disfrutar solo si eres valiente. Y no podemos olvidarnos del ícono: El Alfajor Jorgito Chocolate, una experiencia decadente donde el chocolate robusto se funde armoniosamente con capas indulgentes de dulce deleite criollo, también presentadas por docenas. Pero si estás buscando algo más pequeño pero igualmente sabroso, prueba el Mini Jorgito Blanco Dulce De Leche; este paquete trae seis unidades compactas ideales para esos momentos cuando necesitas un toque azucarado rápido sin comprometer calidad ni sabor auténtico.

Arcor
Arcor, una marca emblemática en la escena de los deleites azucarados. Sus productos son más que simples golosinas; hablamos de auténticos festines para el paladar ubicados entre Almacén > Dulces y Chocolates > Golosinas . Cada bocado es un viaje al epicentro del sabor: desde las notas cremosas hasta las explosiones frutales, Arcor domina con maestría inigualable el arte dulcero. En su extenso catálogo encontrarás todos aquellos clásicos indulgentes que despiertan recuerdos nostálgicos y momentos irrepetibles compartidos alrededor de sus exquisitos manjares. Pero no solo eso, además innova constantemente introduciendo nuevas creaciones destinadas a convertirse en futuros favoritos irresistibles. El cuidado meticuloso con cada detalle se refleja tanto en la calidad superior como también en envolturas vibrantes e ilustrativas que añaden ese toque extra mágico a toda experiencia culinaria ofrecida por esta prestigiosa casa argentina.

Terrabusi
Emergiendo del corazón de la república Argentina, Terrabusi se erige como un faro culinario en el vasto océano de dulces y chocolates. Esta marca icónica ha perfeccionado su arte a lo largo de las décadas, ofreciendo una variedad sin precedentes dentro del universo azucarado que nos rodea día tras día. Su extensa gama despliega desde los clásicos alfajores, pasando por sabrosas tabletas hasta llegar a tentadores bombones; cada uno envuelto en esa magia irresistible que caracteriza al cacao.

Cada producto es un manifiesto comestible donde resalta la maestría chocolatera argentina: texturas sedosas e irresistibles aromas son solo el preludio antes de sumergirnos en esos gustos únicos capaces de transportarnos hacia ese edén llamado infancia. Pero no subestimemos sus golosinas; ellas también portan ese toque distintivo propio de Terrabusi con colores vivazmente argentinos y sabores balanceados para deleitar tanto a niños curiosos como adultos nostálgicos.

Terrabusi va más allá del simple placer temporal: es poesía endulzada destinada a perdurar generación tras generación entre aquellas personas dispuestas no sólo consumir sino disfrutar cabalmente la experiencia gastronómica.